lunes, 31 de agosto de 2009

El Sexismo En Los Video Juegos

Los videojuegos desde sus orígenes han sido racistas, acusados de sexistas y racistas, ingredientes que rara vez faltan en los productos culturales que exaltan la violencia. En este tipo de videojuegos una idea distorsionada de lo masculino es elevada a categoría de universal, en la que solo se dan valores como el poder, la fuerza, la valentía, el dominio, el honor, la venganza, el desafió, el desprecio y el orgullo. En la mayor parte de los videojuegos lo femenino es asimilado a debilidad, cobardía, conformismo y sumisión. La imagen de la mujer en los videojuegos ha sido tradicionalmente maltratada con ferocidad. Sin embargo, las protestas y acusaciones contra el tratamiento discriminatorio de la mujer han terminado por hacer mella en los editores. Los juegos poco a poco, empezaron a incorporar un nuevo de personaje femenino que asume un rol activo en el desarrollo de los videojuegos. Se cree que las mujeres salen menos que los chicos en los juegos pero no detectan o ignoran cualquier situación de sexismo en los videojuegos. El problema es que el tratamiento de la mujer en los videojuegos aunque percibida conscientemente por ellos y ellas, tiene un importante impacto sobre la imagen que las niñas y adolescentes se contribuyen de ellas mismas y contribuye especialmente a que los niños y jóvenes asumen pautas de comportamiento respecto a la mujer elaboradas a partir de una visión estereotipada y limitada de lo femenino. Con este tipo de videojuego las chicas aprenden la dependencia y los chicos la dominación

El Aislamiento

Los video juegos entrañan un problema serio de aislamiento. Algunos entienden que los video juegos les sirven para sumergirse en un mundo de ensueño protector y fascinante que, ante la falta de riesgo real y de consecuencias tangibles de sus acciones, pueden llegar a sentirse tan protegidos en ese mundo aparente que renuncien participar en el mundo exterior. Otros aseguran que los video juegos pueden llegar a aislarse del mundo social que se vive puesto que el jugador habitual de video juegos acostumbrado a controlar el mundo fantástico de la maquina, puede sentirse insatisfecho y descontento ante el incontrolable mundo real. Vivimos así intensa mente una ficción que nos absorbe y nos permite olvidar nuestros problemas cotidianos convirtiéndonos en “héroes” de ficción. Aquí somos el centro de atracción, dejamos de ser anodinos, “como uno más” y nos transfiguramos en los personajes de nuestros sueños, o mas bien, del sueño que alguien diseña por nosotros. Lo cierto es que el aislamiento es otro de los fenómenos relacionados que llevan muchos video juegos que se venden comercial mente y que los publicistas exaltan como altamente adictivos.